En esta crisis, como en todas, los partidos de derechas aprovechan el malestar general para ganar adeptos. Esto se nota en los partidos ultraderechistas que pasan de no tener a casi nadie a ir creciendo, empezando a presentarse a elecciones en algunas ciudades y pueblos, organizándose más, dando conferencias, intentando convencer a más gente…
Como principales “argumentos” utilizan el que los inmigrantes perjudican los intereses del resto de la población, y lo hacen con propaganda hiriente. Así con estas explicaciones equivocadas e ideales patrióticos y, aunque en muchos casos no lo quieran reconocer, fascistas; logran atraer también a sectores juveniles perdidos y sin ningún tipo de conocimiento suficiente para poder pensar por sí mismos y que no les llenen el cerebro con todo lo que quieran.
De este modo, un partido como DN ha conseguido unir a unos cuantos jóvenes sorianos, meterles sus ideas y que se junten formando las juventudes de DN en Soria. Estos jóvenes ya han empezado a pegar carteles. En uno que pude leer el otro día, pedían justicia para el asesino de Carlos Palomino, los 26 años de cárcel a los que se le ha condenado les parecían poco y alegaban que (según ellos), le atacó un numeroso grupo de ultraizquierda y simpatizantes de ETA, y que él solamente se defendió con una pequeña navaja que llevaba en legítima defensa.
Hablando de justicia, hoy que se ha legalizado a Bildu y todos estos grupos están muy indignados, ¿es justo que se ilegalice constantemente a partidos con supuesta apología o relación con ETA y que sin embargo los partidos ultraderechistas campen a sus anchas? ¿Es justo que haya alrededor de 10 partidos diferentes que hacen apología al franquismo y al fascismo y a estos no se les ilegalice? ¿Es justo que partidos que tienen relación con individuos que en los últimos años llevan más muertos que ETA se presenten a elecciones?
Sí, hay que quejarse de la justicia, pero no son ellos los más indicados.
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